Santo Domingo de Guzm谩n naci贸 en Caleruega (Espa帽a) alrededor del a帽o 1170 en una familia noble. Su madre fue la Beata Juana de Aza. En Palencia recibi贸 una buena educaci贸n en diversas materias y se entreg贸 de lleno al estudio de teolog铆a.
En aquel entonces se viv铆a en continuas guerras contra los moros (musulmanes) e incluso entre los mismos pr铆ncipes cristianos. Lo que llev贸 a una terrible hambruna en aquella regi贸n. Domingo se compadeci贸 de los necesitados y los ayudaba entreg谩ndoles sus pertenencias.
Cierto d铆a lleg贸 ante Domingo una mujer llorando que le dijo que su hermano hab铆a ca铆do prisionero de los moros y el joven al no tener nada que darle se ofreci贸 como esclavo para rescatarlo. Este acto impresion贸 a toda la ciudad y se produjeron tales movimientos de caridad que hicieron innecesario que Domingo se entregara.
Con 24 a帽os de edad fue llamado por el Obispo de Osma para ser can贸nigo de la Catedral y a los 25 fue ordenado sacerdote. M谩s adelante el Prelado tuvo que viajar a Dinamarca por encargo del rey Alfonso VIII y se llev贸 consigo a Domingo. En el viaje, el Santo qued贸 preocupado al constatar las herej铆as en que viv铆an los diversos pueblos.
En 1207, Santo Domingo, junto a algunos compa帽eros como el Obispo de Osma, se entreg贸 a la vida apost贸lica, renunciando a toda comodidad y viviendo de limosnas. Al comprender m谩s de la necesidad de una buena formaci贸n cristiana de los fieles, fund贸 la Orden de Predicadores (dominicos) dispuesta a llevar la luz del Evangelio por todas partes.
El Santo fund贸 centros de apostolado al sur de Francia y encontr贸 grandes dificultades en toda la misi贸n que hab铆a emprendido.
Seg煤n la tradici贸n, respaldada por numerosos documentos pontificios, cierta noche Santo Domingo, mientras se encontraba en oraci贸n, tuvo una revelaci贸n en la que La Virgen fue en su auxilio y le entreg贸 el Rosario como un arma poderosa para ganar almas.
La Virgen a su vez le ense帽贸 a recitarlo y le pidi贸 que lo predicara por todo el mundo para que se obtengan abundantes gracias. El Santo sali贸 de la capilla lleno de entusiasmo con el rosario en la mano y, efectivamente, lo impuls贸 por todas partes, obteniendo muchas conversiones.
Dentro de sus pr谩cticas de penitencia habituales estaban las temporadas de 40 d铆as de ayuno a pan y agua, el dormir sobre tablas duras, caminar descalzo por caminos irisados de piedras y senderos cubiertos de nieve, soportar insultos sin responder palabra alguna, predicar a pesar de estar enfermo y nunca mostrar des谩nimo. Era el hombre de la alegr铆a y buen humor.
Santo Domingo, gran amigo de San Francisco de As铆s, parti贸 a la Casa del Padre en Bolo帽a el 6 de agosto de 1221. Fue canonizado en 1234 por el Papa Gregorio IX, quien dijo que “de la santidad de este hombre estoy tan seguro, como de la santidad de San Pedro y San Pablo”. Su fiesta se celebra cada 8 de agosto.
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